Para el verano, uno de mis básicos es el pantalón blanco. Resalta la piel morena y por otro lado combina perfectamente con cualquier color. En esta ocasión lo realicé en tela bastante ligera y transpirable. Como novedad, realicé solamente un bolsillo trasero en vez de los dos habituales para que el diseño fuera lo más limpio posible. Por ese motivo tampoco realicé trabillas, dejando la cinturilla totalmente a la vista.

En este caso el pantalón no tiene pinzas. En general, prefiero utilizar una tela que tenga algo de elasticidad para poder realizar modelos más ajustados al cuerpo. Me explico. Tradicionalmente, los pantalones de hombre se fabricaban normalmente con algodón 100%, lo que aportaba una cierta rigidez, que no permitía muchos movimientos. La solución pasaba por añadir más tela de la cuenta, la cual se ajustaba con una serie de pinzas en el delantero del pantalón.

Hoy en día, con los nuevos tejidos, entre ellos el Spandex, se añaden en cantidad mínima (con un 2% basta) al tejido base para aportar una elasticidad que antes no tenían. De este modo podemos asegurar igualmente todo tipo de movimientos sin temor a que se rompan y sin tener que usar fábrica de más.

El resultado es un pantalón cómodo y ponible no solo en verano, sino en cualquier día soleado. Con este diseño terminé mi triada de pantalones para el verano de 2020, junto con dos fabricados en lino de color verde vivo y tostado.